En un debate televisado para el territorio francés y con escala mundial, los dos candidatos a presidente en Francia, Emmanuel Macrón y Marine Le Pen, atravesaron múltiples cruces naturales por sus diferencias políticas. Cuando llegó el tema de Rusia, Le Pen perdió pie y mucho crédito: Macron enumeró el respaldo que Marine Le Pen siempre le aportó a Vladimir Putin, la forma en que, en 2014, alabó la anexión de Crimea y el préstamo de más de 9 millones de euros que su partido obtuvo del banco ruso First Czech Russian Bank para financiar la campaña para las elecciones regionales y departamentales de 2015 (aún lo está reembolsando). Con un caradurismo inaudito, Marine Le Pen negó todo mientras que Macrón insistió: "Usted siempre fue ambigua no puede defender los intereses de Francia".