Alberto Fernández celebró que este año se pudo cerrar la paritaria docente "quince días antes de que empiecen las clases" para "sacarle a los maestros el problema de su salario". "Cuando llegamos al Gobierno la preocupación de los maestros era ver cómo mejoraban un salario que se había caído al fondo del pozo y hoy con alegría escucho que su preocupación es que no tengan que pagar ganancias", observó.