La inteligencia estadounidense tiene serias preocupaciones sobre la viabilidad de una próxima contraofensiva ucraniana contra las fuerzas rusas debido a problemas con el entrenamiento y los suministros, según los documentos del Pentágono filtrados en los últimos días. Los informes también dan cuenta de la vigilancia a aliados como Israel y Corea del Sur, además de acusaciones contra Egipto por venderle armas a Rusia para la guerra en el país vecino.