Un barco pesquero cargado de migrantes que navegaba hacia Europa se hundió cerca de las costas de Grecia, y al menos 79 personas murieron. Las operaciones de rescate continúan en el lugar, dado que hay decenas de desaparecidos, por lo que no se descarta que el balance de fallecidos pueda aumentar en las próximas horas. Hasta el momento pudieron ser rescatados con vida 104 personas, todos varones mayores de edad, procedentes de Pakistán, Egipto, Siria y Palestina. 24 de ellos fueron trasladados al hospital de la ciudad de Kalamata, a unos 250 kilómetros al suroeste de Atenas.