El suspendido partido entre Brasil y Argentina de las Eliminatorias Sudamericanas fue una cuestión que Infantino no pudo evitar, pero eludió el tema con diplomacia, sin sentar ninguna posición. "Lo que tengo que decir es que se trata de un caso pendiente en la Comisión Disciplinaria de FIFA y que como presidente no puedo ni tengo que intervenir. Los organismos jurídicos son independiente y deciden en base a las reglas", se excusó el dirigente, que calificó como "inaceptable" lo sucedido en ese partido.