Federico Delbonis es un héroe del tenis nacional. Aquel partido que ganó en Croacia, en el quinto punto de la final de la Copa Davis 2016, le habrá otorgado un status indeleble a lo largo de los tiempos. Será una condición intrínseca en su carrera, más allá de que haya encarado una suerte de resurrección desde mediados del año pasado. Hacia fines de la temporada mermó su nivel pero esta semana, en el Argentina Open, tiene su lugar asegurado entre los ocho mejores: este jueves derrotó 6-4 y 6-4 al español Pablo Andújar, en un partido que avizoraba complicado por las emociones del pasado martes, cuando derrotó a su amigo Juan Martín Del Potro en su reaparición en una cancha de tenis tras más de dos años y medio.