Los combates entre el Ejército de Sudán y las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR), un grupo paramilitar del país africano, se extendieron el domingo con un saldo de al menos 60 civiles muertos, entre ellos tres empleados de Naciones Unidas. Durante la jornada se registraron fuertes enfrentamientos con aviones, vehículos blindados y camiones con ametralladoras montadas en la capital de Jartum, la ciudad contigua de Omdurman. Aparte de los combates, desatados por una lucha por el poder entre los dos generales que protagonizaron el golpe de Estado de 2021, la jornada estuvo marcada por un tímido cese de hostilidades de tres horas y la apertura de un corredor humanitario que permitió evacuar a más de mil personas.