Malnazidos marca una nueva visita al trajinado subgénero de los zombies de sonidos guturales y hambrientos de carne humana, con la particularidad de que la acción se sitúa durante la Guerra Civil española. Una apuesta por abrazar con la misma fuerza el revisionismo histórico –distorsionado, desde ya, por las inevitables licencias narrativas– y la fantasía gore, de esas que chorrean toneladas de sangre.