La lava que expulsa el volcán Cumbre Vieja, en la isla canaria de La Palma, sigue avanzando por lo que las autoridades anunciaron el desalojo de unas 800 personas más que se suman a las casi 6.000 que debieron abandonar sus hogares. La erupción del volcán, que sigue en actividad desde hace tres semanas, lleva arrasadas más de 169 hectáreas agrícolas.