Decenas de miles de personas colmaron este domingo el Zócalo, la plaza principal de la Ciudad de México, por segunda vez en cuatro meses, para manifestar su rechazo a una reforma electoral impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador. Bajo la consigna "Mi voto no se toca", una multitud vestida de blanco y rosa, los colores que identifican al Instituto Nacional Electoral (INE), llenó gran parte del paseo y varias calles aledañas del centro histórico de la capital.