En Sochi 2014, la actuación del peruano Roberto Carcelén se convirtió en una de las imágenes de los Juegos. Radicado en Seattle tras conocer a la que luego sería su esposa por internet y aprender a esquiar a los 35 años por incentivo de su pareja, Carcelén aprovechó la laxitud del COI para clasificarse para Vancouver 2010 y ser el primer peruano en unos Juegos Invernales. "Había visto en los Juegos de Turín 2006 a atletas de Kenia y de Brasil, así que me propuse ser el primer peruano en lograrlo", reconoció en ese momento. Cuatro años más tarde repitió la experiencia, con la salvedad que una lesión en las costillas dos semanas antes de competir en Rusia casi no le permite participar. Bajo esas condiciones, terminó último en los 15 kilómetros de cross country a casi media hora del campeón, el suizo Dario Cologna, que lo esperó en la pista para saludarlo.