Racing se presentó en la altura de Quito con la misión de defender su liderazgo en el Grupo A de la Copa Libertadores. Con el regreso de varias piezas determinantes, el conjunto de Fernando Gago golpeó de entrada gracias al prematuro gol que convirtió Nicolás Reniero, cuando el cronómetro no había alcanzado los primeros 120 segundos. Las desatenciones defensivas del Aucas y la perfecta definición del ex San Lorenzo y Argentinos, llevaron a que la acción deba ser revisada por el VAR para confirmar la ventaja. Un grito que se festejó por duplicado.