La reina Isabel II, de 96 años y con crecientes problemas de movilidad, fue aclamada el jueves al aparecer en el balcón del Palacio de Buckingham por una inmensa multitud reunida para celebrar sus 70 años de reinado. Vestida con abrigo y sombrero azul, la monarca se mantuvo sonriente y de pie pero apoyándose en un bastón junto a su primo el duque de Kent, coronel de la guardia escocesa, mientras 1.500 soldados desfilaban frente al palacio en el primer día de su "Jubileo de platino".