Estela de Carlotto entró a la Casa por la Identidad con una sonrisa que no le cabía en el rostro. Venía a anunciar que habían encontrado al nieto 132, exactamente seis días después del hallazgo del nieto 131. Pero la sonrisa tenía una razón extra. “Van a ver su imagen porque quiere que lo conozcan”, avisó la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo. Todas las miradas se enfocaron en la pantalla para divisar los rasgos de Juan José Morales, que desde Tucumán sonreía y exhibía una foto de su mamá, Mercedes del Valle Morales, secuestrada el 20 de mayo de 1976, asesinada y enterrada en una fosa clandestina.