Shinzo Abe, exprimer ministro de Japón, protagonizaba un acto de campaña en la región de Nara, en el oeste del país asiático, cuando recibió disparos provenientes de un arma de fuego. Sufrió un paro cardiorrespiratorio luego de ser alcanzado por proyectiles, aparentemente realizados con una escopeta casera. Fue trasladado en ambulancia al hospital de la ciudad de Kashihara y los servicios sanitarios trataban de que recupere sus signos vitales. Sin embargo, horas más tarde, el PLD confirmó su fallecimiento.