Todo fue mucho más equilibrado entre Porto e Inter. Lautaro Martínez jugó todo el partido para el equipo italiano, pero debió dedicarse más a tareas defensivas, apretando la salida de los rivales, que a desarrollar su oficio de goleador. Inter desplegó un esquema muy cauteloso y se dedicó a cuidar el gol de diferencia ante la voluntad y las escasas ideas de Porto.