A su modo, Los Bilbao, de Pedro Speroni, también es una de esas historias cotidianas que valen una película, aunque parezca provenir de una realidad paralela. De forma modesta, como la vida de sus personajes, se trata de una saga familiar, a la que no le faltan ni drama ni conflictos, pero tampoco épica y hasta alguna historia de amor conmovedora. Iván Bilbao es un boxeador que estuvo preso y que ahora se ha convertido en el prestamista del barrio. Vive con su mujer y su hija, y mantiene una relación muy próxima con sus padres. La forma en que Iván habla a los gritos con su papá, juega con su hija y trabaja con su mujer pueden resultar enternecedoras, del mismo modo en que las discusiones con su madre o sus acercamientos a los morosos se desarrollen al filo de la violencia.