Independiente se puso en marcha. Derrotó por 1 a 0 a Arsenal con un gol de Tomas Pozzo en el segundo tiempo y calmó la ansiedad de su gente. Luego de un comienzo inexpresivo, con mucha tenencia de la pelota y poca profundidad, el equipo que ahora dirige Eduardo Domínguez rectificó errores y pudo justificar la diferencia. Tiene mucho que mejorar todavía. Pero ganando la tarea siempre puede hacerse mejor