Millonario, ostentoso, soberbio, caprichoso, excéntrico, patético, rehén de su propio dinero y de la búsqueda de fama. Con esas credenciales públicas, Ricardo Fort irrumpió en la escena mediática allá por 2009 y se convirtió en uno de los personajes más disruptivos de la Argentina en poco tiempo. Amado y odiado, el heredero de la fábrica de chocolates Fel Fort fue primero un extravagante personaje de Internet, para luego ser avalado por el establishment televisivo con sus apariciones en los programas de chimentos y en Showmatch, el ciclo que le brindó una masiva popularidad. Una rara avis que invirtió millones para comprar fama y, también, un poco de amor, detrás de esa carcaza de frivolidad que vendió como chocolates aunque con sabor amargo. ¿Quién fue Ricardo Fort? ¿A dónde iba? ¿Habrá llegado? Esos son algunos de los interrogantes que intenta dilucidar El comandante Fort, la serie documental que Star + sube este miércoles a su catálogo.