A través de una nota de prensa difundida en medios locales, la cancillería nicaragüense admitió la “suspensión” de las relaciones diplomáticas del gobierno que preside Daniel Ortega con la Santa Sede. El nuevo entredicho entre el país centroamericano y el Vaticano se produjo a raíz de las declaraciones del papa Francisco al medio argentino Infobae. Consultado sobre la situación nicaragüense Jorge Bergoglio sostuvo que “con mucho respeto, no me queda otra que pensar en un desequilibrio de la persona que dirige [Daniel Ortega]”. Y se refirió al obispo Rolando José Álvarez, obispo de la Diócesis de Matagalpa y administrador apostólico de la Diócesis de Estelí, como “un hombre muy serio y muy capaz”. Álvarez se encuentra preso en una cárcel de máxima seguridad porque “quiso dar su testimonio y no aceptó el exilio” dijo el Papa.