Los fallecidos por los devastadores terremotos del lunes han aumentado a más de 8.300, de los cuales 6.234 se registran en Turquía y 2.092 en Siria. En Turquía, donde tuvieron su epicentro los temblores de magnitud 7,7 y 7,6, el último recuento oficial sitúa la cifra de heridos en más de 37.000. Los equipos de ayuda han logrado rescatar a unas 8.000 personas con vida de los casi 6.000 edificios destruidos.