Bohemian Rhapsody en el concierto de Green Day en Argentina

Hay que darle el crédito: Green Day podría ser la única banda que hace saltar a un estadio sin estar en el escenario y con una canción que no le pertenece. A las nueve de la noche, la clásica presentación del trío –que en realidad ya es un sexteto que suma guitarras, teclado y saxo– ponía las cosas en el lugar que quería. Celulares encendidos y todos cantando “Bohemian Rhapsody” como si no existiera el mañana. El conejo borracho sobre el escenario con “Blitzkrieg Bop” y la ferocidad de “American Idiot” como carta de presentación, lanzada bajo fuegos artificiales. Enseguida las explosiones: bombas de estruendo cayendo como desde aviones de guerra en “Holiday”; petardos y una invitada subida desde el público en “Know Your Enemy”. Apenas terminado el tercer tema, con Billie Joe arengando desencajado su eeeooo para que el público le responda, exigiendo que canten, que griten, que bailen, Green Day ya tenía montada su propia sucursal del infierno.