Independiente necesitaba ganar por dos goles o más para avanzar a octavos de final de la Copa Sudamericana. En Avellaneda y con el ímpetu de sus últimos tres partidos (4 a 0 ante General Caballero en Paraguay, 3 a 0 sobre Huracán y 4 a 0 ante La Guaria de Venezuela), la hazaña parecía posible... No estuvo ni cerca. El Rojo perdió 2 a 0 ante Ceará de Brasil y los jugadores se retiraron del estadio Ricardo Enrique Bochini envueltos en reclamos de los hinchas, incluido el "que se vayan todos, que no quede ni uno solo" dedicado principalmente a la dirigencia.