Independiente volvió a perder de local 2 a 1 con Estudiantes y su situación hace agua por donde se la mire. Lleva nueve fechas sin ganar en el campeonato (sólo venció a Talleres en la primera fecha), sumó solo dos de los quince puntos que jugó en Avellaneda y está a tres unidades del último puesto de la tabla de posiciones. Peor imposible. Por eso, mucho antes del pitazo final del árbitro Hernán Mastrángelo, los hinchas explotaron su bronca cantando contra los jugadores (todavía no contra los dirigentes) y llenando de silbidos e insultos su salida del campo de juego.