Las primeras imágenes de las Madres de Plaza de Mayo que dan la vuelta al mundo, la mítica foto del gol de Diego Maradona con la mano a los ingleses en el Mundial de 1986 y la serie sobre el histórico Juicio a las Juntas Militares, son algunas de las fotos más emblemáticas captadas por la lente de Eduardo Longoni. Este fotógrafo, que tuvo a la violencia como una marca indeleble desde sus inicios, sintetiza el compromiso de toda una generación de fotoperiodistas que resistieron en la calle durante los oscuros años de la dictadura cívico-militar. Longoni es un artista inquieto, que se reinventa y se lanza a buscar nuevos desafíos profesionales. Mientras prepara una retrospectiva por sus 40 años de trayectoria, resignifica sus fotos recurriendo a nuevas formas y lenguajes artísticos. Hoy, alejado de las calles, Eduardo vuelve la mirada hacia sus orígenes. Recorre los lugares de su infancia en la ciudad de Mar del Plata, y decide montar allí una proyección pública de fotos, imprimiendo sus imágenes sobre las olas embravecidas del mar. Las fotografías de Eduardo Longoni nos interrogan. ¿son bellas o comprometidas? ¿Gritan una verdad o son una obra de arte? Sea cual fuere la respuesta, su mirada estuvo siempre atravesada por un mismo sentido: el de la honestidad.