(Por Hernani Natale) Mick Jagger, el amo y señor absoluto del escenario, creador de un estilo al que muchos quisieron imitar pero nadie pudo igualar; ícono de la contracultura de los `60 que sintetizó el apotegma "sexo, drogas y rock and roll", y, fundamentalmente, el motor que mantiene en movimiento a la más grande y duradera maquinaria que dio la historia del rock llamada Los Rolling Stones, cumple 80 años, una cifra solo creíble si se lanza una mirada retrospectiva a su recorrido artístico y su consecuente influencia. Es que el vigor que este hombre, nacido el 26 de julio de 1943 en el condado de Kent, en el Reino Unido, aún despliega sobre el escenario y la fascinación que provoca su estampa desafían los datos duros o, en todo caso, contradicen la relación natural que se establece entre el paso del tiempo y los achaques físicos, o la pérdida de impacto entre el público.