Dicen que no hay representante más cabal del espíritu londinense que las agrias aguas del Támesis. La máxima vuelve a corroborarse en el tercer episodio de Slow Horses (reciente estreno de Apple TV+, cada viernes un nuevo episodio). Una jerarca del MI5 (Kristin Scott Thomas) se encuentra con el jefe de un grupo de agentes caídos en desgracia (Gary Oldman) a orillas de ese río. Es de noche y se siente la tirria. Ente chanzas se pasan información clasificada hasta que la mujer corta el parloteo ostentando su mando. ¿Qué hace su interlocutor? Responde con una flatulencia que le regala más tufo al entorno. La entrega de seis episodios, creada por –otro- Will Smith (Veep y The Thick of It) y dirigida íntegramente por James Hawes, además de respetar el engranaje del género de espías, regala algunas notas sobre la actual coyuntura europea y un tono zumbón que la acerca a la comedia de las oscuras.