La Fiscalía de México dictó prisión preventiva para el exprocurador general Jesús Murillo Karam, un día después de ser detenido y acusado de "desaparición forzada, tortura y delitos contra la administración de la justicia" en el marco de la investigación por la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa entre la noche del 26 y la madrugada del 27 de septiembre de 2014. Murillo Karam es el exfuncionario de más alto rango en ser arrestado por la masacre ocurrida en el sureño estado mexicano de Guerrero. Su captura se produjo horas después de que el presidente Andrés Manuel López Obrador pidiera verdad y castigo a los responsables de la desaparición de los alumnos, tras la publicación del informe de una comisión gubernamental que investiga el caso desde 2019 y lo considera un crimen de Estado.