"Si hay alguien poseído por el demonio ese es Bolsonaro", exclamó Lula en un acto de enorme simbolismo a las puertas de la fábrica de Volkswagen, en Sao Bernardo do Campo, su cuna política y donde en la década de 1970 se hizo conocido como líder sindical. "No queremos un gobierno que distribuya armas, queremos un gobierno que distribuya libros. No queremos un gobierno que alimente el odio, queremos un gobierno que alimente el amor", expresó un Lula emocionado que a los 76 años empezó a caminar oficialmente su séptima campaña electoral.