Butterfly Vision - Trailer

El cine estadounidense ha tratado en diversas oportunidades el tema de las dificultades de readaptación de los soldados que vuelven del frente de batalla, desde Lo mejor de nuestra vida (1946) hasta Francontirador (la de Clint Eastwood, 2014), pasando por El francotirador (la de Michael Cimino, 1978) y Rambo (1982 y subsiguientes). Ahora es el cine ucraniano el que aborda la cuestión, con una historia de ficción que tiene lugar antes de la invasión rusa (la película fue filmada en forma previa a ese evento), cuando el ejército de ese país libraba una guerra contra los secesionistas pro-rusos asentados en la región de Donbás. La soldado Lilia Vasilenko (Rita Burkovska, de aspecto lógicamente abrumado) especialista en reconocimiento aéreo por manejo de drones, vuelve a casa, en una operación de intercambio de rehenes, tras haber estado dos meses en manos del ejército secesionista. Recibida como heroína de guerra (“tiene unas bolas de acero”, comenta alguien por whatsapp), Lilia se reencuentra con sus parientes y amigos. Entre ellos su marido, veterano de guerra. Aunque es capaz de sonreír por su liberación, Lilia está como ida por el trauma vivido. Las cosas empeoran cuando una ecografía muestra que está embarazada de dos meses, noticia que la sume en el desconcierto, y que provoca que el esposo rompa todos los muebles de una habitación al enterarse. Mientras tanto Lilia recibe algunas muestras de rechazo de parte de civiles, al tiempo que el Estado no le brinda la atención necesaria.