Un niño crece con sus padres adoptivos en Grecia. A la edad de 20 años comete un homicidio. Mientras cumple su condena, se enamora y tiene un hijo con una mujer que trabaja en la prisión. Ambos desconocen el hecho de que ella es su madre biológica. Veinte años después, vive en Londres con su hija y empieza a perder la vista.