La puesta The Rake’s Progress compartirá durante estos días el escenario del Teatro Colón con el Festival Argerich, que el sábado dio comienzo con la sala repleta de un público particularmente efusivo. Al punto que –incluso durante el soporífero Noneto Op. 139 de Josef Rheinberger que articuló la primera parte– abundaron los aplausos entre cada movimiento, eso que a los melómanos “de la primera hora” tanto molesta, pero que podría interpretarse también como que, por un momento, se está cumpliendo la tan ansiada y necesaria renovación de público.