El presidente de Chile, Salvador Allende, acepta la recomendación del saliente jefe del Ejército, Carlos Prats, que deja el cargo por la graves crisis política, y designa como su sucesor a Augusto Pinochet. Dos semanas y media más tarde, el 11 de septiembre, Pinochet derroca a Allende, que muere en el Palacio de La Moneda, en el inicio de la dictadura. Prats será asesinado en 1974 en Buenos Aires.